De becario a socio de la empresa

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Cómo pasé de becario a socio de la empresa

Hoy comienzo esta sección de mi blog, a la que he llamado «Mi Historia», y que mejor manera de comenzarla que con una parte de mi camino profesional del que guardo un muy buen recuerdo. Una parte de mi sigue teniendo un especial cariño a esta empresa «QualityCourses» y así como a mi socio y más que amigo, Manu. Seguro que muchos de los que me conocen, saben algo de esta historia, pero os vengo a contar con detalle, cómo pase de ser becario a ser socio de la empresa en apenas un año.

El comienzo de mi historia, cómo pasé de becario a socio de la empresa

Corría el año 2013, a llovido mucho desde entonces, cuando empecé mi camino profesional, nunca imaginé que en tan solo un año pasaría de ser un simple becario a convertirme en socio de QualityCourses. Hoy quiero compartir mi historia, llena de desafíos, aprendizajes y logros, esperando que inspire a aquellos que, como yo, alguna vez soñaron con alcanzar grandes metas.

Mi vida como becario

Mi historia en QualityCourses comenzó cuando, aún cursaba los últimos años de la universidad, conseguí una beca en esta empresa de cursos de idiomas en el extranjero. Oficina en el centro de Barcelona, llena de ordenadores, rodeado de profesionales, mesa de ping pong en la terraza… ¡Qué te voy a contar! Esto para un Canario como yo, recién salido del cascarón, ¡Era una pasada!.

10 de enero de 2013, no sólo lo recuerdo porque era mi cumpleaños, tengo esa fecha marcada en memoria como si fuese ayer. Fue el día que realicé la entrevista en QualityCourses, el primer día que conocí a Manu, una excelente persona y un profesional como la copa de un pino, de los mejores emprendedores, empresarios, jefes, socios, trabajadores, comerciales y motivadores que he conocido.

Como anécdota, aún recuerdo esa entrevista, como si fuese ayer. Iba nervioso, no te lo voy a negar, me había leído, sin exagerar, 10 blogs de como hacer una entrevista de trabajo, intenté ponerme guapo, ¡Ya ya, ya se que es difícil, pero había que causar buena impresión!, el trayecto en tren desde Terrassa se me hizo más corto de lo habitual, me sudaban las manos y no sabía que era lo que me iba a encontrar en esa oficina del centro de Barcelona.

La entrevista transcurrió muy bien, dejando de lado mis nervios y qué en aquel entonces quizás era un chico más introvertido de lo que soy ahora, todo fue rodado, Manu me hizo sentir muy cómodo en la entrevista, congeniamos bien, quizás porque ambos somos del sur, y otra de las cosas que recuerdo, es una frase que me dijo en ese momento Manu: «Buscamos buenas personas, buenas.» El resto, es historia, después de unos días me confirmó que había sido seleccionado, a partir de entonces, era becario en QualityCourses.

Desde el primer día, me sentí entusiasmado con la oportunidad de aplicar mis conocimientos y aprender de profesionales experimentados. Mi rol inicial era el de programador web, una tarea que me apasionaba y en la que me esforzaba por destacar.

Ganando confianza y demostrando compromiso

La empresa tenía dos socios en aquel momento, y aunque mi papel era el de un becario, siempre me involucré más allá de lo que se esperaba de mí. Trabajaba largas horas, proponía ideas y me comprometía con cada proyecto como si fuera propio. Mi implicación no pasó desapercibida y pronto comencé a ganar la confianza de Manu, socio que más adelante se quedaría a cargo de la empresa.

Un cambio inesperado

Después de casi un año en QualityCourses, se produjo un cambio significativo: uno de los socios decidió dejar la empresa, para dedicarse a otros negocios. Esta decisión dejó a mi jefe, con el 100% de las acciones, en una situación complicada, ya que necesitaba a alguien de confianza que le ayudara a seguir gestionando y llevando adelante el proyecto.

Se trataba de un momento de grandes cambios a nivel estructural dentro de la empresa, había que recomponer departamentos, delegar funciones y reestructurar el esquema organizativo, entre otras cosas.

Llegó la propuesta: de becario a socio de la empresa

Un día, para mi sorpresa, Manu, el socio que permaneció en QualityCourses me llamó a su oficina. Con una mezcla de emoción y seriedad, me ofreció convertirme en socio de la empresa. Su propuesta me dejó sin palabras. Mi esfuerzo, dedicación y la confianza que había construido durante ese año habían dado frutos de una manera que nunca hubiera imaginado.

No había que decidir en ese momento, aunque era inexperto, sabía que tenía que pensar en la propuesta y en el proyecto antes de tomar una decisión. Pero no cabe duda, era una oportunidad que a muy pocos se le presenta.

Desafíos y dificultades

Aceptar la oferta no fue una decisión fácil. La empresa estaba atravesando un momento difícil; la crisis había afectado nuestras ventas y necesitábamos un cambio de rumbo para recuperarnos.

Recopilé toda la información que necesitaba sobre la situación de la empresa antes de ir de vacaciones, y en mi vuelta a Tenerife lo consulté con varias personas, para que me ayudaran o me dieran su punto de vista ante esta nueva situación que se me presentaba, desde mis padres hasta un asesor. Y aunque soy de ideas claras y algo cabezota, me ayudaron a sacar pros y contras de lo que sería mi nueva implicación.

Finalmente, acepté y pasé de ser becario a ser socio de la empresa. Comenzaba un bonito camino de adaptación, aprendizaje y de asumir otras responsabilidades. Además, pasar de ser compañero a jefe del resto del personal fue un duro camino a nivel psicológico. La responsabilidad era enorme, y adaptarme a mi nuevo rol de liderazgo implicaba un gran desafío personal y profesional. No sé si lo hice bien o no, pero cuando das todo de ti, estás tranquilo.

Superando obstáculos

La transición no fue sencilla. Me enfrenté a la necesidad de tomar decisiones difíciles, de aprender sobre gestión empresarial y de liderar un equipo que antes eran mis colegas. Sin embargo, cada obstáculo se convirtió en una oportunidad de crecimiento. Trabajé incansablemente junto a mi socio para estabilizar la empresa, implementar nuevas estrategias y recuperar nuestra posición en el mercado.

Había mucho por cambiar y mucho por hacer, seguía desempeñando mi papel de programador, pero ahora tenía muchas más reuniones en mi agenda, a la vez, teníamos que hacer una reestructuración profunda del modelo de negocio, gestionar el personal, atraer nuevos clientes, mejorar nuestra conversión de venta, reducir el gasto, buscar nuevos modos de financiación, marketing, facturación, impuestos, vamos… un sin fin de tareas que poco a poco fueron dejando en mi unos conocimientos, que a día de hoy, son aplicables a cualquier trabajo o negocio.

QualityCourses logo antiguo
QualityCourses : de becario a socio
De becario a socio de QualityCourses

Uno de los cambios que introdujimos en la empresa durante mi etapa y que a día de hoy se mantiene, fue el cambio de la identidad corporativa de la marca, en el que tuve una relevante implicación.

Reflexiones y aprendizajes

En estos momentos, ya no formo parte de manera activa de la empresa, aunque sigo en posesión de mis acciones. Después de unos años, donde hubo muchos buenos momentos, pero también muchos malos, tuve que volver a tomar una decisión difícil. La empresa, en aquel momento (año 2020), no se recuperaba al ritmo que queríamos, y algunas de las decisiones u opciones que tomamos, tardaban en dar sus frutos.

Siempre tuve claro, que ser socio de la empresa , conllevaba unas responsabilidades, unos posibles beneficios y unas posibles perdidas también. Y cuando tienes un negocio, primero están tus empleados, luego tus proveedores y si se da el caso los últimos en cobrar u obtener beneficios, si los hay, son los socios.

Eso me llevo a una situación personal en la que tenía que tomar un nuevo rumbo. Tuve que dejar de vivir en Barcelona, el coste de la vida allí, me lo impedía, volver a Tenerife y a partir de aquí enfocar mi futuro profesional de otra manera. Esto marcaría otra etapa en mi vida, una etapa durante la que decidí «dejar», aunque no del todo, la informática y la programación, pero esto os lo contaré en otro capítulo de mi historia.

Mirando atrás, me siento profundamente agradecido por esta experiencia. Pasé de ser programador a empresario, aprendí sobre gestión de personal, administración de empresas y, lo más importante, sobre la resiliencia y el poder de la dedicación. Esta etapa de mi vida me demostró que con esfuerzo y pasión, es posible alcanzar logros que parecen inalcanzables.

Un futuro prometedor

Hoy, QualityCourses no solo ha superado los desafíos, sino que ha crecido y se ha consolidado en el mercado. Gracias, en parte a muchas de aquellas decisiones que tomamos Manu y yo en aquellos momentos complicados, una de ellas, enfocar los esfuerzos en el producto del que ahora son líderes: año escolar en el extranjero.

Cada día es una nueva oportunidad para aprender y mejorar, y cada logro es un recordatorio del camino recorrido. Mi historia es un testimonio de que, a veces, las oportunidades más grandes surgen en los momentos más inesperados.

Yo, he seguido mi camino por otros lares, y aunque tampoco me ha ido mal. ¿Quién sabe? Igual en un futuro QualityCourses y yo nos volvemos a cruzar, pero si es así, como si no, ¡Gracias por tanto QualityCouses! ¡Gracias por todo Manu! Aquí siempre tendrás un amigo y un hermano pequeño, siempre fuiste y serás una inspiración y una fuente inmensa de aprendizaje a nivel profesional y personal.

Espero que mi experiencia sirva de inspiración a aquellos que luchan por sus sueños. Con determinación y trabajo duro, es posible convertir los sueños en realidad y transformar los desafíos en grandes éxitos.


Gracias por leer mi historia de como pasé de becario a socio de la empresa. Si tienes alguna experiencia similar o quieres compartir tus pensamientos, me encantaría saber de ti en los comentarios. ¡Hasta la próxima!

2 comentarios en “De becario a socio de la empresa”

  1. Yo formé parte (aunque un trocito pequeño de la historia) de ese proyecto y he de decir que fue una etapa que te marca, a mi escala, mucho más pequeña, pero permanece ahí, en el recuerdo. Compartí contigo, Dani, mesa de trabajo y piso de estudiantes. Vaya noches de curro y Monster. Portátil para arriba y portátil para abajo.
    Cuanto aprendimos y nos divertimos. Días festivos en donde sólo tu y yo estábamos en la oficina currando.
    Una etapa bonita en la que tuvimos que madurar más rápido de lo normal, cada uno con su historia. Y seguiremos así, hacia delante, siempre.

    Un abrazo.

    1. ¡Que alegría leerte Sergio! Tu como tantos otr@s formo parte, muy importante, de esta historia. Compartimos mucho y no lo olvido, tengo para escribir un libro con tantas anécdotas jeje.

      Una etapa muy bonita como dices, no todo fue trabajo, pero estoy seguro, que como yo, aprendiste también mucho de tu paso por el proyecto. Y aunque la vida y el tiempo nos ha llevado por caminos separados, guardo muy buen recuerdo tuyo y un especial cariño, por supuesto. La época de la uni, se merece una sección a parte en mi historia. Pero sobre todo me alegro de los amigos como tú que me llevé, buena persona buena, donde las haya.

      Gracias por pasarte por aquí y por tu comentario que me llevado a recordar y revivir de nuevo aquella época.
      Un abrazo grande amigo!

      PD: por ahí perdido tengo un video de uno de esos días festivos en la oficina donde nos poníamos música nada mas llegar y arrancabas la mañana con un bailecito jajaja. ¡Que recuerdos!

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